El incidente ocurrió a pocos metros de la Escuela Cristiana Evangélica Argentina, situada en Alvear al 200, de Ituzaingó, al oeste del conurbano.
Todo se inició alrededor de las 7:40 de la mañana cuando el hombre, de unos 40 años, dejó a sus dos hijos en el colegio, uno de ellos del nivel primario y el otro en el secundario.
Según indicaron fuentes policiales y testigos del hecho, el hombre fue seguido al menos por un individuo hasta su camioneta Chevrolet S10, que había dejado estacionado a la vuelta del colegio, sobre la calle Besares.
Delincuentes con armas de fuego se llevaron al hombre secuestrado, mientras que otros padres de alumnos que presenciaron el incidente avisaron al teléfono de emergencias 911.
Según contó el damnificado a la Policía, los secuestradores le preguntaron si había alguien en su casa, a lo que respondió en forma afirmativa.
Sin embargo, poco después escuchó una conversación en la que los secuestradores se decían que tenían que "abortar la operación" y de inmediato lo liberaron junto a su vehículo, en San Antonio de Padua, del vecino distrito de Ituzaingó, después de ser despojado de dos teléfonos celulares que tenía encima.
La esposa del hombre secuestrado dijo, al ser interrogada por la prensa, que "no es la primera vez que le pasa algo parecido" a su marido, aunque se negó a dar mayores precisiones.