Rafecas, el abogado pidió la habilitación de la feria judicial para dicar una cautelar que suspenda el funcionamiento del edificio para evitar “un nuevo Comañón”.
El planteo- según el letrado- es “ante los gravísimos riesgos que corren miles de empleados, funcionarios, público en general, mis clientes y mi propia persona, por el total abandono y temerarias omisiones a las mínimas reglas de prevención de incendios que son de cumplimiento obligatorio”.
“Desde hace más de dos años las entradas a las escaleras centrales y principales del Palacio de Justicia, en todos sus pisos, se encuentran bloqueadas”, detalló el abogado, quien además, remarcó que “los ascensores son antiguos y no tienen espacios necesarios para transportar una camilla médica a una ambulancia”.
El edificio “tiene 60 mil metros cuadrados de superficie” en ocho plantas, “con cientos de oficinas y miles de toneladas de papel, que es considerado altamente inflamable”, así como “todas las salidas a la escaleras se encuentran bloqueadas en el cuarto piso” donde funciona la Corte Suprema de Justicia.
“Concretamente las vías de escape son absolutamente incapaces para una eventual evacuación de emergencia y guardando las distancias, se transformarán en un gigante Titanic”, enfatizó el abogado.