Al respecto, el senador Galmarini añadió: “Gran parte de las decisiones vinculadas al comercio no están relacionadas estrictamente a políticas locales. En todo caso, el gobierno municipal puede atenuar impactos, tratar de ayudar en algunos detalles, no descuidar los centros comerciales, iluminarlos, arreglar las veredas, mejorar la calidad del estacionamiento, no desvariar en términos de planificación urbana”.
En cuanto al presente de la Cámara de Comercio de San Isidro, su presidente contó: “Estamos sólidos, siempre quisimos ser una cámara absolutamente independiente. Sí tenemos fuerte relación y formamos parte de la CAME (Confederación Argentina de la Mediana Empresa) y la CAC (Confederación Argentina de Comercio), dos entidades que nos permiten tener mejor llegada al comercio, la industria y la PYME de San Isidro”. A su vez, tienen casi todo listo para la cuarta edición de Arte a Cielo Abierto, que se desarrollará los días 28, 29 y 30 de mayo para promocionar los comercios de Lomas de San Isidro a través de un evento que fusiona la pintura y la música.
“Entre el tema del estacionamiento medido, la doble imposición: te gravan los ingresos y también la provincia, sumado al estancamiento económico a nivel nacional, en Las Lomas nunca hubo tantos negocios desocupados como ahora. Algo que también se ve en San Isidro, donde está muy planchado el sector”, opinó Federico Meca, asesor del senador Galmarini y comerciante de la calle Segundo Fernández, quien también participó de la reunión.
Las autoridades de la cámara coincidieron: “Las tasas locales son un problema. Porque tenés el tema de la doble imposición con la tasa de comercios e industrias, que nosotros lo peleamos. Hace dos años, cuando implementaron el sistema, peleamos duramente, y la oposición nos acompañó”. En cuanto al impacto de esa medida, evaluaron: “Depende de las industrias, aumentó un 400%, depende del tipo de actividad. Impactó un 200%. Hay industrias importantes que se han ido. Siempre es una pena que se vaya una empresa”.
En referencia a la renovación del centro comercial de Las Lomas, Galmarini agregó: “Siempre es importante buscar consensos en la forma en que ordenás el crecimiento de la actividad económica, sin afectar la calidad de vida de los vecinos. Tenemos que discutir qué progreso queremos. Por ejemplo, con lo del Hipódromo: yo no te estoy diciendo que esté mal, lo que estoy diciendo es que tenemos que discutir qué tipo de progreso queremos. ¿Queremos vivir en un barrio como Villa Urquiza o en el San Isidro de casas bajas y espacios verdes? El crecimiento económico aumentó el parque automotor, hay que ver cómo ordenamos el tránsito. Hay una discusión que es previa o va de manera paralela”.
