Los voceros explicaron que, además, el novio de la sospechosa estuvo trabajando en los últimos días como jardinero de una de viviendas asaltadas.
Tras el análisis de las cámaras de seguridad del barrio, los agentes de la Policía lograron determinar que la empleada doméstica habría entrado a una de las casas en momentos en que sus propietarios estaban de vacaciones.
Al regresar a la vivienda el pasado domingo, los dueños de casa hallaron sus cajas fuertes violentadas y comprobaron que les habían robado dinero y joyas. Los informantes indicaron que ante la sospecha de los investigadores, la empleada doméstica y su pareja fueron aprehendidos y sus casas allanadas, aunque la policía no logró encontrar pruebas que los incriminen por los robos. Por eso, los sospechosos quedaron imputados aunque luego fueron liberados ante la falta de evidencias en su contra.
