El juez emitió hoy esa orden en respuesta a una consulta del BoNY, ante demandas que había recibido de parte de bonistas que poseen títulos con legislación europea.
El BoNY rechazó esas acusaciones de bonistas europeos y defendió su postura al sostener que está cumpliendo con una orden judicial de su país.
La Argentina depositó en las cuentas del BoNY en Buenos Aires 539 millones de dólares, para hacer frente al pago de servicios de deuda que vencía el 30 de junio.
Griesa le ordenó al BoNY que no los gire a Nueva York, dado que la Argentina no cumplió con su sentencia de pagarle a los holdouts 1.330 millones de dólares en efectivo y en una vez.