El trabajo estadístico se realizó como prueba piloto en los distritos de Bragado, Carlos Casares, Chivilcoy, Pinamar, Mercedes, Villa Gesell e Hipólito Irigoyen donde se conformaron los equipos de salud del Prosane (Programa de Sanidad Escolar), que articulan los gobiernos nacional, provincial y municipal.
El ministro de Salud bonaerense, Alejandro Collia, explicó que desde esta semana el programa se empezó a implementar en 24 de los 77 distritos previstos para el resto del año.
“Esta experiencia de sanidad escolar permite realizar un valioso diagnóstico para implementar políticas sanitarias basadas en la prevención, a medida de cada realidad en un trabajo conjunto que llega a donde están los problemas para resolverlos”, precisó.
El relevamiento en los sietes distritos mencionados fue una prueba piloto en la que un grupo de médicos, promotores de salud y vacunadores evaluaron el estado de salud de los chicos.
Mario Calcaterra, odontólogo de la Dirección Provincial de Salud Bucal, detalló que la mayoría de los alumnos llega al odontólogo recién cuando no puede ni dormir del dolor.
“Si bien no hay mucho que hacer contra los factores genéticos, sí es posible prevenir las caries con el cepillado después de las comidas”, dijo.
Explicó que la dieta “también juega un rol clave en el cuidado de la dentadura: los chicos atentan todo el tiempo contra la integridad de sus dientes porque consumen golosinas y gaseosas en grandes cantidades”.
Luis Crovetto, director provincial de Atención Primaria y a cargo del Prosane, dijo que los chicos “por un lado consumen exceso de azúcares y por otro se mueven poco, la ecuación da como resultado el sobrepeso”.
Aclaró que el plan no es sólo evaluarlos sino también educar en el autocuidado y la prevención del sobrepeso, porque “más allá de lo meramente estético, la obesidad es una enfermedad severa, que aumenta el riesgo de sufrir problemas cardiovasculares, hipertensión y diabetes en el futuro”.
