Independiente dio un paso fatal en el Monumental y tras el segundo gol de River, algunos de sus hinchas rompieron el alambre de la tribuna Centenario al ver que se apagaba la ilusión de mantenerse, como toda su rica historia, en la máxima categoría.
El rendimiento del rojo tuvo demasiados altibajos y si bien tuvo ráfagas en las que le generó peligro a River la victoria del “millonario” nunca estuvo en riesgo.
River tuvo más gente en ataque y desnudó problemas defensivos de Independiente, que tuvo también sus chances, como un cabezazo de Hernán Fredes que fue a las manos de Barovero y un disparo que terminó mal de Montenegro.
Sobre los 21, en una salida fallida de Fredes, Funes Mori jugó con Lanzini, un rebote en Funes Mori y la pelota que le cayó a Iturbe, sin marca, para definir ante Diego Rodríguez.
Independiente sintió el golpe y tuvo dos chances una de Miranda que Barovero que sacó con esfuerzo sobre el travesaño.
River tuvo una doble chances pero del arquero tapó dos veces a Funes Mori.
En la segunda mitad, Brindisi apostó por Luciano Leguizamón, que no rindió en su estadía en Independiente más allá de sus lesiones, y esta vez no fue la excepción.
River se plantó de contra y aprovechó a los 18 una corrida de Iturbe por derecha, y tras un centro atrás Lanzini definió junto a un palo.
Allí sufrió con el canto “vos sos de la B” que emergía de la tribuna de enfrente e hinchas exaltados rompieron el alambrado de la Centenario y se colaron al alero que entolda la parte baja y tras dos minutos con el partido detenido, el árbitro Saúl Laverni lo reanudó al tiempo que la situación se calmaba.
Tardó Independiente en reaccionar y a los 44 apareció Daniel Montenegro con un disparo cruzado desde fuera del área y el descuento.
En los cinco que quedaron con el adicionado, Independiente intentó una y otra vez con centro sumando a arquero Diego Rodríguez como delantero. No alcanzó.
Fue el un clásico con aspiraciones distintas. River sigue creyendo, Independiente se escurre hacia el destino tan temido.