Asimismo, en declaraciones a radio América, Giménez consideró “impresionante y movilizante” el informe periodístico difundido en el programa Periodismo para Todos, de Jorge Lanata, que involucra al empresario kirchnerista Lázaro Báez en supuestas operaciones de lavado de dinero y fuga de capitales.
“Me pareció una investigación fabulosa, los 'tipos' la están haciendo hace dos años...”, elogió la estrella de televisión y dijo dar crédito a los datos sobre presuntas maniobras de corrupción que salpican al poder político: “¿Cómo no vamos a creer si presentan documentos?”, enfatizó.
La llamada “diva de los teléfonos” insistió en tomar distancia en las voces que cuestionaron ese informe: “En este país siempre se tiende a culpar al inocente; si entra un ladrón a tu casa y vos lo matás, vas en cana”, graficó.
Ante otra pregunta, dijo no haber participado de la marcha del llamado 18A contra las políticas oficiales, pero respaldó la actitud de la ciudadanía de manifestarse.
“Me hubiera gustado que la Presidenta hablara, que no ignore lo que pidió más de un millón de personas en la calle”, añadió, al criticar la actitud de la jefa de Estado que en ningún momento se refirió a la masiva convocatoria.
Susana Giménez insistió en destacar la protesta: “Creo que la gente tiene que expresarse, me parece fantástico; éste es un país de gente muy mansa, de gente que siempre acepta lo que le pasa, somos muy especiales y esto tiene que cambiar”.
“Siempre fuimos como muy egoístas: 'yo estoy bien, así que los demás que se jodan'“, se lamentó.
Cuando se le preguntó qué dirigente le “gustaba en la política”, la actriz se manifestó dubitativa: “No sé, mucho, mucho, mucho, nadie”, respondió.
Al inquirírsele si le agradaban dos presidenciables como el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, o el gobernador bonaerense, Daniel Scioli, señaló: “Son mis amigos, los quiero, tienen buenas intenciones los dos”.
Sin embargo, evitó explayarse sobre la cuestión. “No quiero hablar de política”, se excusó.
