La mamá de Matías, antes del inicio del acto procesal, declaró a los periodistas que "uno de los acusados ya había matado a Máximo Leguizamón, un nene de 9 años, y después de eso quedó libre y luego mató a Matías".
En el banquillo de los acusados estaban sentados, entre otros, Richard Fabián Souto, Ana Cristina Moyano, Jennifer Stefanía Souto Moyano, Elías Emanuel Vivas, Celeste Verónica Moyano, Néstor Facundo Maidana, Federico Esteban Maidana y Gabriel Figueroa. Todos llegan a este juicio detenidos como supuestos coautores materiales del delito de "secuestro extorsivo seguido de muerte" en perjuicio de Berardi, un estudiante secundario de 16 años, fallo que quedó firme por la Cámara Federal de San Martín.
La fiscalía está representada por Eduardo Codesido, la querella por Eduardo Durañona e Ignacio Palazuelos, en representación del padre, Juan Pablo Berardi, y hay cuatro defensores oficiales.
Matías Berardi, hijo de un veterinario y una maestra jardinera, era el mayor de cuatro hermanos y fue secuestrado el 28 de septiembre de 2010, poco antes de las 6.30, cuando volvía a su casa de una fiesta de egresados en la Costanera Norte porteña.
Los delincuentes lo interceptaron en el cruce de la autopista Panamericana y la ruta 26, y desde allí lo trasladaron a una herrería situada en la localidad de Benavídez, también en la zona norte del conurbano.
El adolescente, que jugaba al rugby en la Asociación Deportiva Francesa y al fútbol en el club Chiclana, alcanzó a escapar y corrió unos 300 metros hacia la ruta 9 pidiendo auxilio en voz alta y gritando "íMamá... mamá!" Pero sus captores, entre ellos varias mujeres, salieron a perseguirlo a la vez que alertaban falsamente a los vecinos que el joven había querido asaltarlos, y nadie del barrio intervino en su auxilio.
Una vez recapturado, los secuestradores aguardaron hasta la madrugada siguiente y cerca de las 6 lo llevaron a un descampado de la zona de Campana, donde Souto supuestamente lo ejecutó a sangre fría de un disparo.
A Berardi sus amigos lo llamaban "Peter Pan" y en el colegio había sido elegido "mejor compañero" durante los últimos ocho años.
Se espera que durante el juicio declaren aproximadamente 200 testigos.
