La Legislatura bonaerense ya había sancionado un aumento de tributos hace poco más de tres meses, pero las dificultades financieras de la provincia obligaron a avanzar en una segunda etapa de incrementos.
Consultado sobre la iniciativa impositiva, Mariotto dijo que "nosotros acompañamos todas las políticas del Ejecutivo", aunque aclaró que "lo vamos a analizar y si hay que hacer algún aporte lo vamos a hacer".
Mariotto, quien declaró públicamente que recibe "instrucciones" de la presidenta Cristina Fernández, tuvo variadas muestras de distanciamiento con el gobernador, aunque en el caso de la primera reforma impositiva de mayo lo acompañó en la votación a través de sus legisladores afines. El proyecto de Scioli, según trascendió, incluiría un aumento del Inmobiliario Urbano para inmuebles de alta valuación, un cobro anticipado del impuesto a los Ingresos Brutos para las mil empresas que más facturan en la provincia, una mayor presión impositiva sobre los countries y un incremento en la alícuota del impuesto a los Sellos para los fideicomisos financieros o "pooles" de siembra.
En otro orden, el vicegobernador evitó responder sobre el planteo que legisladores de la oposición realizaron ante la Corte Suprema reclamando la restitución a la provincia de los fondos retenidos de la masa coparticipable para financiar a la Administración Nacional de Seguridad Social (ANSES).
"Es un planteo de la oposición y no tengo opinión al respecto", contestó Mariotto tras participar de la presentación de un libro en el anexo del Senado bonaerense.
En 1992, la Nación y las provincias acordaron una deducción del 15 por ciento de la masa coparticipable para financiar la transición del sistema previsional hacia el régimen de capitalización, que comenzó a aplicarse en 1994.
Hace un mes, la provincia de Córdoba dispuso por ley el abandono de ese pacto, en un paso que podría ser imitado por Corrientes.