Claro que el primer gol de Bueno tuvo una consecuencia adicional que también fue clave para el desarrollo del juego, ya que los dirigidos por Facundo Sava se quedaron con un futbolista menos por la expulsión del mediocampista Mauro Bogado.
Con la victoria propia y la estrepitosa caída de Banfield a manos de Colón de Santa Fe, los dirigidos por Ricsardo Caruso Lombardi dirimirán sus chances de permanecer en la Primera División frente a Instituto, primero en Córdoba y luego en el Nuevo Gasómetro.
La tensión que dominó al escenario del Bajo Flores en el primer período se trasladó al campo de juego y a San Lorenzo, que fue un manojo de nervios, todo le costó muchísimo.
Además, las rápidas noticias de desventas que afectaban a Banfield y Atlético de Rafaela inquietaron aún más a los hinchas azulgranas, quienes sabían que un gol propio al menos temporalmente los sacaba de la posición de descenso directo.
Pudo haber convertido el local a los 14, cuando el Pipi Romagnoli dejó solo al Emmnauel Gigliotti, pero el delantero, cara a cara con Corti, definió mal, al cuerpo del arquero.
Como si fuera poco, a los 26, tras una precisa jugada colectiva y en el primer acercamiento visitante, Emmanuel Más envió un centro hacia atrás desde la izquierda que capturó Caprari, quien con un remate alto venció a Pablo Migliore.
Pero cuando parecía que todo era oscuro en el panorama del Ciclón, a los 29, Bueno luchó por la pelota en las alturas con Corti, quien parecía tener la situación controlada, pero tras un leve empujón del uruguayo, no observado por el árbitro Germán Delfino, el delantero resolvió dentro del area chica y empató. En la segunda parte, la tensión siguió siendo protagonista de la dramática película que fue la tarde del Ciclón en el Nuevo Gasómetro.
Pero ahi estaba Romagnoli, quien en todo momento puso la cara por el grupo y fue el hacedor del milagro. A los 10 minutos, el armador acarició el balón en un córner desde la derecha para que Kannemann, quien ingresó increíblemente solo, con un cabezazo dterminara el vital y aliviador 2-1.
A los 36, Romagnoli condujo con maestría un contraataque y habilitó a Bueno, quien libre de marcas ante Corti puso cifras definitivas al encuentro.
En definitiva, el conjunto de Boedo estuvo lejos de jugar un buen partido, pero tuvo en Romagnoli a su hombre clave, quien con apariciones decisivas fue trascendente para lograr una victoria que les permite soñar con la permanencia en la categoría, la que ahora pasó a depender de San Lorenzo, ya sin necesidad de resultados ajenos.
