La presidenta Dilma Rousseff defendió hoy, al abrir la cumbre femenina, una mayor participación de las mujeres en la política mundial y resaltó que ellas tienen un papel fundamental en los esfuerzos para la erradicación de la pobreza.
Afirmó que "las mujeres y los niños son el sector principal de la pobreza en el mundo. En Brasil son las grandes aliadas para la erradicación de la pobreza, pues invierten sus ingresos en la familia y en la comunidad", según consignó la agencia Brasil.
Rousseff alertó asimismo sobre la discriminación y violencia que sufren las mujeres y llamó a terminar con todas las formas de desigualdad.
Por su parte, Bachelet se manifestó en la misma dirección al referirse a las altas tasas de mortalidad de mujeres y niñas en el mundo "a causa de la violencia o el hambre".
La directora de ONU Mujeres se refirió también a todos los tipos de violencia que sufren las mujeres, desde el tráfico de personas hasta aspectos intrafamiliares.
El encuentro finalizó con la firma de un documento en el que se expresa la necesidad de la igualdad de género, y de políticas firmes contra la discriminación contra las mujeres, para el logro de un futuro sostenible. (Télam)
