Andrés Doña, secretario gremial de la entidad, señaló en declaraciones a la prensa que la medida de fuerza se tomó para que YPF "se comprometa a abastecer a las estaciones de servicio por igual, así como a renovar todos los contratos existentes y a devolver la bandera a las que se las quitó".
"Son unas 192 estaciones de servicio de todo el país las que se suman al paro", precisó el sindicalista, quien remarcó que en los últimos años "se perdieron 30 mil puestos de trabajo" por el cierre de "tres mil" bocas de expendio.
La protesta, que podría repetirse en Semana Santa, según dijo a DyN el titular del sindicato, Carlos Acuña, se llevó a cabo entre las 10 y las 13.30 también para exigir "la devolución de las banderas a las estaciones de servicio blancas y el respeto irrestricto del convenio que rige la actividad".
"YPF obliga a sus trabajadores a afiliarse al SUPE, porque de esa forma paga salarios inferiores a los que percibirían si estuvieran afiliados al SOESGYPE", se quejó.
Ayer, la petrolera consideró que la manifestación "parece estar motivada por otros intereses", no salariales y la calificó de "ilegal".
La compañía señaló que "no existe conflicto alguno con el personal de sus estaciones de servicio, ya que dicho personal está encuadrado en el Sindicato Unidos Petroleros e Hidrocarburíferos (SUPEH)".
