En ese sentido, recordó que en 2003 en el distrito esa tasa "ascendía a 16,2 por cada mil nacidos vivos", lo que "significa que en nueve años, con el trabajo articulado de los equipos de salud municipales, provinciales y de Nación, hemos logrado bajar la mortalidad infantil a un ritmo sostenido".
De todas formas, admitió que el objetivo de su cartera es "bajar a un dígito la mortalidad infantil en la provincia" Durante un encuentro con trabajadores de la salud que hoy celebraron su día, Collia afirmó que "en 2010 la provincia de Buenos Aires ya había logrado un descenso récord en la tasa de mortalidad infantil al llegar al número de 12 por mil nacidos vivos y la baja (en 2011) con respecto a ese año es de un 4,17 por ciento", manifestó.
La tasa de mortalidad infantil es la medición anual de la cantidad de muertes de bebés menores de un año cada mil nacidos vivos, y constituye uno de los indicadores más significativos a la hora de evaluar el estado de salud de una población. Entre las causas de la baja en la tasa de mortalidad infantil, Collia mencionó la reducción de los "decesos por bronquiolitis, una de las causas reducibles de mortalidad infantil que mayor peso tenían años atrás, con un programa que garantiza atención de calidad y entrega gratuita de medicamentos y aerocámaras en todos los centros de salud".
Otro de los factores que contribuyó a reducir estos índices, fue, sostuvo, la disminución "en un 80 por ciento de la lista de espera para operar a chiquitos recién nacidos con cardiopatías congénitas, uno de los núcleos duros de la mortalidad infantil", apuntó el ministro.
