El hombre, de 50 años, era amigo de la familia de la víctima y tenía buena relación con el niño, quien en varias ocasiones pasaba las tardes en su local.
Durante la investigación, personal de la sub DDI Tigre-San Fernando determinó que el imputado se aprovechaba de la confianza que tenía con los padres del menor de edad para abusar de él, a quien además le hacía ver películas pornográficas.
Fuentes policiales precisaron que exámenes médicos y psicológicos posterior establecieron la veracidad de los abusos relatados por el niño.
El acusado fue detenido en su domicilio por personal policial y se le iniciaron actuaciones por "abuso sexual agravado con corrupción de menores".