Coki Ramírez llegó caracterizada de policía y palpó a Tinelli como si fuera un sospechoso. Dijo que no quería hablar de Larissa Riquelme pero se hizo cargo de sus twitts donde aseguraba que la paraguaya "lo que menos quiere es bailar".
También contó que Tony Kamo le había hecho un truco en camarines que no podía revelar en cámara. "Sólo quiero hacerte una averiguación de antecedentes, Marcelo", pidió. Y empezaron las preguntas: "¿Nombre?"; "¿Perro o gato?" (R: "Perro"); "¿Vino o champagne?" (R: "Vino"); ¿Mirtha o Susana? (R: "Las dos"); "¿Su cantante favorita?" (R: "Lola Ponce, La Sole y Coki").
A la hora del Strip Dance, obtuvo 30 puntos y buenas críticas del jurado. "Hubo abundancia erótica; estuvieron maravillosos, sensuales, relajados", dijo Moria.
Antes de despedirse, Coki le canto a capella y muy de cerca a Marcelo el bolero "Usted". Al terminar, insinuó besarlo. "Eso es acoso", se quejó Casán, pero no pocos en el estudio esperaban "el beso". El conductor apuró "un pico" y Coki se abalanzó sobre él para besarlo rápidamente y salir corriendo de estudio.
Evangelina Anderson fue la siguiente en bailar, pero su "Barbie" no le alcanzó para convencer a un jurado que solamente le dio 23 puntos. "Me gustó la entrada, pero después no me quedó nada limpio", dijo Casán, y Pachano agregó: "No me convenció nada; todo estuvo como sucio".
Siguió Eugenia Lemos, caracterizada como una empleada de hotel. "Me quiero morir porque está mi papá ahí", contó al ingresar al estudio, y le dedicó unas graciosas rimas a Marcelo Polino, donde le pedía cambiar "su corazón de piedra por uno de peluche". Al terminar le pidió un abrazo y el jurado se negó. El puntaje fue de 31 puntos.
El último en bailar fue Tony Kamo, quien sumó escasos 21 puntos, en base a una coreografía donde estuvieron presentes la magia y el ilusionismo. "No me produjo nada de erotismo", lo criticó Graciela Alfano, y Polino fue más contundente: "Esto no es magia-dance, sino Strip Dance". (Reporter)
