Allí se identificó al propietario, de 47 años, y se constató que había "más de 30 motores, 90 tapas de cilindro, 130 cigüeñales, 250 pistones y gran cantidad de piezas y accesorios" cuya procedencia no estaba justificada, añadieron los voceros.
Luego de la inspección policial se estableció que tres de los motores, de marcas Ford, Volvo y Fiat, poseían adulteraciones en sus numeraciones identificatorias.