Garay había hecho un gran desgaste en la primera mitad de la pelea, pero el serbio nacionalizado alemán mejoró considerablemente en la parte final, y en el décimo asalto conectó un gancho certero de zurda que tomó retrocediendo a Garay y lo envió a la lona.
El argentino se mostró entero por momentos y puso en aprietos a Huck, pero no le alcanzó para quedarse con el cinturón crucero de la OMB.