en donde el rockero ofreció un mini show de cinco canciones que incluyó los clásicos "Una noche más", "Llámame", "Perdiendo el control", "Un poco de satisfacción" y "Tirá para arriba".
Casi cinco mil espectadores que se mantuvieron firmes en ese playón y más de doce mil lo vieron mientras ingresaban al estadio de Nuñez y aplaudieron entusiastas al denominado "jefe del rock en español".
Concluido el breve set, de apenas media hora, Mateos se dirigió al campo de juego , en el que lo esperaban un piano eléctrico y un micrófono especialmente dispuestos para que el ex Zas interpretara el Himno Nacional Argentino.
La ejecución fue prolija y cuidadosa y terminó con el músico arengando a los presentes a cantar más fuerte en el "o juremos con gloria morir", mientras recibía una fuertísima ovación.
"Fue increíble cantar el Himno delante de la multitud, una emoción tremenda, es algo inolvidable, imposible de describir. Me sentía como si estuviese comenzando mi carrera, tenía unos nervios increíbles. Pero en un momento la gente hizo un respetuoso silencio para acompañarme en otro tono, paso algo mágico. Soy un agradecido de poder vivir algo así, realmente la pasé bárbaro, fue una desbordante sensación de felicidad", explicó posteriormente Mateos.
Tras su actuación, el músico permaneció por un rato en el palco de Sony Music -en el que también estaban presentes artistas como Bahiano, Florencia Peña y Mariano Otero- y más tarde se retiró junto a su familia, mientras era saludado efusivamente por las personas que lo reconocían mientras abandonaba el estadio. (Reporter)