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Scioli se quejo porque se clausuran locales que venden alcohol a menores, pero la justicia sanciona poco

El gobernador bonaerense, Daniel Scioli, se quejó hoy porque de más de 800 clausuras de locales que vendían alcohol a menores de edad, la Justicia sólo dictó sentencia en 20 casos, a la vez que pidió "ayuda" a los padres para controlar a los jóvenes en las llamadas "previas".
Al ser consultado hoy sobre los casos de excesos cometidos por jóvenes en el consumo de bebidas alcohólicas, Scioli recordó que "la Legislatura sancionó leyes que posibilitaron operativos de controles nocturnos".

De esta forma, resaltó, "se hizo evidente una baja del 80 por ciento de ingreso a los hospitales de jóvenes intoxicados por la ingesta excesiva de alcohol".

"Llevamos (realizadas) 3.375 inspecciones a comercios, en 871 locales se detectaron irregularidades (que) motivaron su clausura y más de 42 mil botellas de alcohol fueron incautadas", precisó el funcionario en declaraciones a Radio 10.

Una vez que los inspectores detectan las irregularidades, el caso es derivado a "juzgados de Paz o de Faltas", que deben aplicar sanciones que, según la ley, implican multas de "hasta 10 mil pesos y arresto", manifestó Scioli.

Pero el gobernador lamentó que "de estas 871 clausuras solamente se dictaminó sentencia en 20 casos". Con respecto de lo que los adolescentes llaman "la previa", que significa la ingesta de bebidas alcohólicas antes de ir a un boliche, Scioli advirtió que desde el gobierno se pueden "hacer muchas cosas" pero no "meterse en la casa de los chicos", donde se lleva a cabo el consumo en exceso.

En ese sentido, opinó que los controles realizados en los locales de venta de bebidas "hay que complementarlos" cuando las infracciones "se ponen a disposición de la Justicia", que es el momento, dijo, en que es necesario "que se apliquen las sanciones y multas previstas".

A raíz de la implementación de controles en los boliches, interpretó, "se ha ido corriendo el problema" y "la previa forma parte de la intimidad, son casas privadas", aclaró.

"En este caso tenemos que apelar a la responsabilidad de de los chicos y sus padres", remarcó Scioli. Por eso, "pido la ayuda de los padres para que entre todos logremos encontrar un equilibrio, una racionalidad entre divertirse, ir al boliche y tomar algo", indicó.

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