Migueles, de 21 años, fue secuestrado el 2 de marzo de 2008 cuando iba a trabajar a la parrilla de su cuñado en la localidad bonaerense de Santos Lugares.
Los secuestradores pidieron un rescate de 30 mil pesos pero terminaron aceptando seis mil, a pesar de lo cual al día siguiente mataron a Migueles de tres tiros por la espalda.
El homicidio, según trascendió, habría ocurrido por una "interna" en la banda, ya que algunos de sus miembros no habrían estado de acuerdo con el monto del rescate y uno de ellos mató a Migueles cuando en la discusión habría intentado escapar.
La detención de Torres se produjo cuando un integrante del grupo de secuestradores se comunicó al 911 y contó los hechos. La Fiscalía había pedido la prisión perpetua para Torres, quien fue el único imputado en la causa que llegó a juicio, lo que fue ratificado por los jueces Germán Saint-Martin, Gustavo Varvello y José Marinaro.
"Era lo que esperábamos; agradecemos de todo corazón a los jueces que creyeron y se preocuparon por lo que estaba demostrado por el fiscal", dijo una hermana de Migueles luego de la condena.
Otro familiar sostuvo que "se especulaba con que Torres iba a quedar en libertad, pero a partir de ahora van a caer todos los que participaron del asesinato de Diego Migueles".
