A punta de pistola, los asaltantes sorprendieron a la familia y la maniató con precintos, tras lo cual la encerró en un baño.
Luego, los ladrones saquearon la casa llevándose aparatos electrónicos, joyas y 60 mil euros que estaban guardados dentro de una caja en una de las habitaciones, dijeron las fuentes policiales.
Finalmente, los delincuentes huyeron en un auto presumiblemente robado que se hallaba estacionado en el frente de la casa.
Un vecino que escuchó ruidos extraños llamó al 911 pero cuando los policías llegaron los ladrones ya habían escapado.