edición 7360 - visitas hoy 13480

elcomercioonline.com.ar Noticias Zona Norte

Noticias Zona Norte

Los rehenes del "robo de siglo" creen que los ladrones usaron armas reales

Cuatro de los primeros rehenes que declararon en el juicio oral por el "Robo del siglo" al Banco Río de Acassuso creen que las armas utilizadas por los asaltantes eran verdaderas y no réplicas como las halladas en el lugar del hecho.
Se trata de los testimonios coincidentes de un vigilador privado y un empleado del banco prestados hoy en la cuarta audiencia del debate oral y el de dos clientes que declararon hace dos días.

"Yo no estaba armado dentro del banco y no utilizo armas, pero algo conozco de armas", dijo el vigilador privado Jorge Luis Ferreira, quien estaba en el primer piso del banco cuando se concretó el robo y vio que los ladrones usaban armamento real.

Las armas que utilizaron los delincuentes para concretar el robo forman parte de uno de los puntos de importancia del debate oral, ya que si bien los investigadores no lograron comprobar la aptitud de las mismas, los fiscales del juicio Eduardo Vaiani y Gastón Garbus pretenden que se los acuse por utilización de armas reales.

Ante esta situación, los jueces del tribunal oral en lo criminal 1 de San Isidro, María Elena Márquez, Alberto Ortolani y Gonzalo Aquino, decidieron exponerle al testigo distintas armas, entre ellas las secuestradas durante los allanamientos a los imputados y otras de juguete.

Ferreira fue claro al marcar el arma que llevaba uno de los delincuentes en el robo al banco: "La que se utilizó fue una de éstas", y señaló una pistola calibre 9 milímetros.

Por su parte, el empleado del banco encargado de atender empresas Martín Igolnikov declaró hoy que cuando era mantenido de rehén en el subsuelo junto a otras tres personas logró ver armamento que para él era verdadero.

"En un momento la compañera que estaba junto a mí gritó porque había visto explosivos y yo vi tres granadas y tres pistolas que para mi eran verdaderas", afirmó.

Este empleado fue precisamente quien encontró el mensaje irónico dejado por los asaltantes para burlarse de la policía porque habían logrado el "Robo del siglo" aparentemente sin utilizar armamento.

Antes de huir a bordo de gomones por una alcantarilla subterránea con el botín, a pesar de estar rodeados de unos 200 policías, los ladrones dejaron el mensaje escrito en un papel: "En barrio de ricachones sin armas ni rencores. Es sólo plata y no amores".

En audiencias anteriores, José Fernández Massa declaró que cuando estaba operando en un cajero automático de la entidad, un delincuente se acercó de atrás y le rodeó el cuello con un brazo para conducirlo junto a los otros rehenes.

Precisó que en ese momento escuchó como el ladrón "montaba" la pistola y al accionar la corredera cayó un proyectil al piso, lo que no hubiese ocurrido si se trataba de la réplica de un arma.

Otra de las rehenes testigos que acentuaron las sospechas de los fiscales fue Stella Maris Casal, quien afirmó ante el tribunal que cuando tramitaba una chequera en uno de los escritorios vio que el asaltante con delantal blanco y de ojos claros "tenía colgada un arma larga", que nunca fue hallada en el lugar del hecho.

El juicio oral que comenzó el lunes último continuará a las 10 del martes próximo con declaraciones de testigos, pero antes las partes y los jueces realizarán una inspección ocular en el banco, a pedido de Ernesto Vissio, uno de los defensores.

Los imputados Alberto De la Torre (56), Araujo (41), Sebastián García Bolster (40) y Julián Zalloecheverría (51) están acusados de robo agravado con armas de fuego cuya aptitud para el disparo no pudiera tenerse por acreditada, en poblado y en banda, con penas entre tres y diez años de cárcel.

El "Robo del Siglo" ocurrió el 13 de enero de 2006 en la sucursal Acassuso del Banco Río, cuando cinco delincuentes robaron al menos ocho millones de dólares, joyas y alhajas de oro, brillantes, piedras preciosas, perlas, relojes, lapiceras y encendedores, según la elevación a juicio efectuada por el juez Rafael Sal Lari.

Los ladrones no sólo vaciaron las cajas de seguridad sino también obligaron a la jefa operativa del banco y al contador a abrir el tesoro de la entidad, debiendo soportar el retardo de su sistema de seguridad para sacar pesos y dólares.

El asalto se perpetró en medio de una toma de rehenes y los ladrones eludieron el cerco de 200 policías escapándose con el botín a bordo de un bote por alcantarillas subterráneas.

Cuando el grupo Halcón ingresó en la sucursal, sólo quedaban los clientes y los empleados que habían sido mantenidos cautivos, las cajas saqueadas y un curioso mensaje: "En barrio de ricachones sin armas ni rencores. Es sólo plata y no amores".

De la Torre (ex comerciante) y Araujo (ex profesor de artes marciales y artista plástico) están sindicados como quienes entraron al banco en un auto y tomaron los rehenes, García Bolster (técnico electrónico) como el que construyó el túnel y esperó en el bote para escapar con el botín y Zalloecheverría (ex comerciante), quien estaba en la camioneta con la que escaparon.

Últimas Noticias