El académico responsabilizó del posible retroceso de la enseñanza artística "a la ley de Educación nacional (sancionada en 2005 durante la gestión de Néstor Kirchner) que propone lo mismo que la ley Federal de Educación (del gobierno de Carlos Menem), que es bajar el nivel".
El directivo de la EMPA señaló que "el 82 por ciento de la educación artística que se dicta en el país tiene lugar en institutos y escuelas de arte de la Provincia de Buenos Aires" y son carreras "de 4 años de duración que en lugar de formar parte de las universidades las llevan a las escuelas".
Sostuvo que "más que hacerla arancelada, quieren que la educación artística pase a la escuela primaria y la EGB (educación general básica), que los conservatorios vayan a la secundaria y que los chicos estudien música como lo hacen actualmente" en el nivel medio.
Cantore, ex rector de la Escuela que funciona en dos sedes en el partido de Avellaneda y dicta las carreras de Instrumentista en Música Popular (charango, bandoneón, entre otras) y Profesor de media para personas con conocimientos musicales, dijo que el director general de Educación, Mario Oporto, "prometió solucionar el histórico problema de edificio propio y adecuado y no lo hizo".
"Cuando suspendimos las clases en abril de 2004, porque nos llovía en los pianos y faltaba el oxígeno y agua como actualmente, Oporto nos prometió invertir 3.500.000 pesos para construir en la sede original de Italia 36 (que ya no existe) un edificio de 3 pisos, con auditorio y con 100 mil horas cátedra", recordó.
En este sentido, dijo que durante la gestión de Adriana Puiggrós en la cartera bonaerense "y en acuerdo con el ex intendente de Avellaneda Baldomero "Cacho" Alvarez, con el nuevo discurso progresista nos prometieron jerarquizar los planes de estudio".
"En 2007, nuevamente con Oporto, la promesa se redujo a entregar 20 millones de pesos y entonces decidimos no empezar las clases y se acoplaron los alumnos", agregó.
La EMPA, con sedes en avenida Belgrano al 500 y Mitre en la bajada del Puente Pueyrredón, "tiene una demanda importante de profesionales de las provincias argentinas y del exterior, de Chile, Venezuela, Perú, Cuba, debido a que la enseñanza es de calidad y gratis", dijo.
"No es el problema de la EMPA ni del conservatorio de Música de Morón, también llueve en los pianos de los institutos de Arte de Luján, en las escuelas de Música Popular de Mendoza y Salta", sostuvo Cantore.
"Esto es parte de una propuesta política de que las instituciones estén en permanente conflicto", concluyó.
