Esta cifra representó la mayor cantidad de adhesiones en los últimos tres años.
Respecto de 2008, aumentó 20 por ciento el número de contribuyentes que regularizó su situación fiscal mediante alguna de las facilidades que brindó la Agencia.
El director ejecutivo de ARBA, Martín Di Bella, sostuvo que "es tiempo de establecer nuevas condiciones que fortalezcan el vínculo y la confianza de los contribuyentes".
"Para ello, y con el objetivo de otorgarle mayor equidad e igualdad al sistema recaudatorio, se estableció a partir de hoy un nuevo régimen de planes de pagos y cancelación de deudas con el fisco", destacó Di Bella.
Según explicó, "las acciones de la Agencia y los planes de facilidades que se disponen diferencian claramente entre aquellos que cumplen o tienen voluntad de hacerlo y los que realizan maniobras para postergar sus obligaciones tributarias".
En ese sentido, las nuevas facilidades de pago para los impuestos Automotor, Inmobiliario y de Ingresos Brutos, tienen bonificaciones de hasta 35 por ciento sobre intereses, tasa sobre saldo de 1 por ciento y pueden cancelarse hasta en 60 cuotas.
Pero incluye sólo a aquellos contribuyentes cuya deuda no esté judicializada ni fiscalizada en etapa de discusión.
"El objetivo es contemplar la situación de aquellos que mantienen deudas con el fisco expresando voluntad de pago y ser menos tolerantes con los que dilatan la cancelación de sus obligaciones realizando maniobras de especulación fiscal", puntualizó Di Bella.
En consecuencia, no habrá quita de intereses ni bonificaciones para los contribuyentes morosos que opten por acogerse en etapas de fiscalización o estén en juicio.
Desde ARBA destacaron que la antigüedad de la obligación sin cancelar es inversamente proporcional a los beneficios que recibirán en los planes de financiación implementados.
Asimismo, los ciudadanos morosos que acceden a planes con descuentos en ningún caso abonarán menos que si hubieran pagado en término