Una de ellas apunta a que la víctima frecuentaba el lugar y conducía a compradores de droga al lugar, ubicado a cinco cuadras del barrio carenciado “las Casitas”, que podría albergar a los delincuentes. El asesinato –infiere la policía- se habría producido porque García habría “hablado de más” o habría entregado a los compradores de estupefacientes.
Los hombres que habrían cometido el hecho están identificados, ya que fueron vistos mientras ingresaban corriendo al barrio alrededor de las 21:30, y salieron 20 minutos más tarde del lugar en dos motos. Hasta las seis de la tarde, no habían regresado al barrio “Las Casitas”.
La segunda pista derivada de las declaraciones de los familiares de la víctima indica que García se hallaba amenazado de muerte por su ex yerno, quien había convivido junto a su hija durante ocho meses y estaría purgando una condena por homicidio. El joven, que ya se encuentra detenido y a la espera de los resultados de las pericias en su celular, le habría quitado la vida con varias puñaladas a su ex suegro.
La tercera versión que se debe comprobar, es la que ubica a García como parte de una familia conocida como “Los Tucumanos”, quienes se encuentran enfrentados con otra familia del barrio denominada “Los Molinas”, en una rencilla que ya se cobró la vida de cuatro integrantes de las dos familias. Estos últimos datos fueron detectados con la información proporcionada por el personal de la seccional policial San Fernando Cuarta-Virreyes.
