Tras nueve meses de continuas bajantes, el dique La Quebrada recuperó 4 centímetros de su alicaído nivel.
No obstante, analizan mantener esta semana las medidas para ahorrar agua con cortes de dos días alternados en Río Ceballlos, Unquillo y Mendiolaza, lo que decidirán sus intendentes.
En Salsipuedes, otra población de las Sierras Chicas, el agua llegó con pedrea pero hubo una leve recuperación en las napas que abastecen a los pozos proveedores, aunque los vecinos de los sectores altos del pueblo seguirán recibiendo el agua en camiones cisterna.
En la zona del Cóndor y Copina, región de las Altas Cumbres donde nace el río San Antonio -que alimenta de agua a Villa Carlos Paz-, si bien la lluvia "no fue muy copiosa, lo bueno es que cayó parejo, de a poco, lo que permitió una buena absorción", dijo Jorge Boido, vocero de la Cooperativa Integra, proveedora del servicio de agua.
"Cayeron unos 18 milímetros que no trajeron mucho caudal. Sin embargo, sí calmó el estrés de la gente que estaba muy nerviosa por la falta de precipitaciones y el consumo se volvió a situar muy por debajo del promedio", explicó.
En la ciudad de Córdoba, que se alimenta de agua del dique San Roque, se sostienen los controles para evitar su derroche y aplican severas multas a los infractores.
Mientras tanto, el Ente Regulador de Servicios Públicos acelera los pasos para instalar medidores de agua en las viviendas que aun no los tienen.
Con cielo parcialmente nublado y una temperatura máxima anunciada en 33 grados, el pronóstico prevé desde mañana hasta el viernes nuevas lluvias que son aguardadas con ansiedad, especialmente en el norte cordobés donde el fin de semana no cayó una gota. (Télam).
