El Programa Buena Vista se implementa desde 1998 y en un principio estaba destinado a niños de Preescolar y Escuelas de Enseñanza Especial. Con el correr de los años, la propuesta se extendió, llegando a abarcar actualmente todos los niveles educativos.
“Junto con los maestros nos planteamos que había algunas dificultades en el aprendizaje de los chicos y chicas y, desde la Dirección de Salud Escolar, se decidió emprender este proyecto -que tuvo sus antecedentes en el Programa Provincial Veo Veo- de manera sistemática en nuestra ciudad”, señaló el Intendente Osvaldo Amieiro acerca de los comienzos de esta iniciativa y aseguró, sobre el futuro, que continuará “para contener a los chicos en lo social y en el ámbito educativo”.
Amieiro destacó el papel fundamental que cumple la familia, y les dijo a los padres: “si hay una comunidad que, como ustedes, acompaña a los chicos, el Estado puede hacer realidad esta política sanitaria para continuar mejorando la calidad del proceso enseñanza-aprendizaje. Hoy recorremos un camino con muchas posibilidades y se trata de dar a los chicos una mano para que tengan una oportunidad de aprender”.
El relevamiento del Programa Buena Vista se realiza en dos etapas. En la primera etapa se efectuaron las pruebas de agudeza visual. En total, se visitaron 106 establecimientos educativos, evaluando a 18.000 chicos y jóvenes.
Como resultado del primer paso, se detectaron 1.600 casos que requerían control oftalmológico y en la segunda etapa, el equipo de especialistas de la Fundación Zambrano realizó revisaciones oftalmológicas, con el móvil del Ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires, individualizando aquellos chicos que necesitaban los lentes.
