La patota sorprendió a la chica a pocos metros del colegio. “Eran seis, tenían de todo, incluidas manoplas de hierro. Creo que la intención de algunas era matarme, porque mientras me pegaban una de ellas dijo que me dejen, que no me maten, porque podrían tener problemas con la ley. Me pegaron patadas, piñas, y también me cortaron. Nunca pensé que podía pasarme una cosa así”, expresó la muchacha en declaraciones televisivas que reproduce Diario Popular.
En un primer momento, las atacantes le habían pedido a la víctima la billetera y la mochila, lo que obtuvieron sin resistencia, lo que no impidió que empezaran a castigar a la asaltada con total brutalidad. “Me decían que yo me la daba de hermosa, y mencionaron que el novio de una de ellas había dicho que yo le gustaba, entonces parece que se organizaron para desfigurarme y arruinarme”, recordó la joven.
“Siempre veía por televisión que a otras chicas le pasaban estas cosas. Yo nunca hice nada violento, jamás provoqué a nadie. Mientras me pegaban, decían que no iba reírme más. Parece que les molesta que sea feliz”, concluyó.