El imitador saludó a sus colaboradores, mostró el vestuario y repitió a la perfección los latiguillos y recursos habituales de la diva, sin dejar hablar a Tinelli mientras hacía preguntas y las terminaba contestando él mismo.
Poco después el animador anunció la llegada de la verdadera Legrand, quien entró con alfombra roja, un ballet caracterizado en estilo Luis XV y el aplauso de todos los presentes. "Gracias, me van a hacer llorar", dijo la conductora, a quien Tinelli le manifestó su emoción por tenerla en el ciclo.
Fiel a su estilo, Legrand tomó la palabra y elogió a su imitador. "El otro día tenía mucha lola. Mejoró mucho, hoy está 10 puntos. Chiqui segunda, felicitaciones", le dijo a su doble.
Además, aseguró que cuando amenazó iniciar acciones legales si se burlaban de ella no lo dijo en serio. "Lo de mandar carta documento lo dije al pasar", sostuvo haciéndose la inocente.
Por otro lado, se preguntó si realmente sería como el personaje que encarna Bossi. "Yo pienso ¿uno será así de verdad? Yo creo que uno es así", dijo. Aunque para diferenciarse de la falsa "Chiqui" fue categórica. "Yo soy Mirtha Legrand, usted es Mirtha Lepetit", dijo antes de volver a elogiar a su doble.
Al ser consultada sobre su opinión de "ShowMatch" dijo que le gusta casi todo, aunque criticó el corte de polleras que hacía el animador el año pasado. Y arremetió contra un tipo de televisión que no le gusta. "La televisión está muy zafada, sin límites. Aunque sólo miro televisión de mi país", indicó.
Respecto a Tinelli, sostuvo que el conductor es un "seductor" y afirmó que todo el tiempo le llegan chismes de que tiene una novia nueva.
Además, reveló que busca información para su ciclo a través de Internet. "Con el Google averiguo todo. Así como averiguan en que año nací, yo averiguo cuando nacieron los demás", sostuvo.
Después, Mirtha, su clon y Tinelli se sentaron a una mesa preparada especialmente para la ocasión y Bossi puso nervioso a su jefe cuando le preguntó si era cierto un affaire que le adjudica con la presentadora brasileña Xuxa. "¡Yo lo vi, lo juro por mis nietos!", exclamó Legrand, quien relató que había visto al animador entrar "desaforado" a un hotel de la zona de Retiro en el que se alojaba la "Reina de los bajitos" cuando hacía su ciclo en Argentina.
En la charla también hubo un pequeño espacio para la política, en el que la animadora sostuvo que del gobierno de Cristina Fernández de Kirchner hay cosas que le gustan y cosas que no.
"Es muy autoritaria y un poquito soberbia y nos da lecciones de todo, como una maestrita. Creo que debería ceder, es un momento en el que los argentinos tenemos que unirnos", indicó, al tiempo que consideró que no debería viajar tanto para preocuparse de temas como la gripe A, la inflación y la inseguridad.
La doble de Mirtha aprovechó entonces para preguntarle a Tinelli qué opinaba de Cristina Fernández. El animador terminó confesando, un poco a regañadientes, que ve a la primera mandataria "un toquecito agrandadita".
Para el final de la emisión quedó un dueto entre Marcelo y la invitada, quienes cantaron el tema "Una estúpida más" de Pimpinela, aunque el anfitrión no salió bien parado de su incursión en el canto.
El cierre fue con una Legrand sumamente emocionada que hasta se animó a hacer el "chau, chau, chau, chauuu" de Tinelli. "Ha sido una de las noches más felices de mi vida. Muchas gracias. Me he sentido mimada, querida y respetada", dijo antes de despedirse. (Reporter)
