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"Los exitosos Pells" tuvo un final abierto pero feliz

Los exitosos Pells tuvo un final abierto pero feliz
Un beso de verdadera pasión luego de presentar las noticias del día fue el cierre que Telefe, Endemol y Underground eligieron para "Los exitosos Pells", la celebrada ficción nocturna que concluyó anoche.
Luego de varias idas y vueltas, finalmente Gonzalo (Mike Amigorena) consiguió engañar al malvado Franco Andrada (Hugo Arana), registrando con una cámara oculta la confesión del ex dueño de Mega News.

Sin saber que sus palabras estaban siendo transmitidas a todo el país en directo, el villano reveló el chantaje que ejercía sobre Sol (Carla Peterson) y su padre, Roberto (Alejandro Awada).

Además, explicó en detalle la estafa que le estaba realizando a Nuñez (Mirta Busnelli) y dejó en claro que él podía manipular a los televidentes. Pero cuando se enteró de que estaba siendo filmado, ya fue demasiado tarde.

Revelada la verdad, la policía se llevó preso a Andrada junto con su asesor Ricardo, además de Roberto, quien aceptó su culpa y le pudo pedir perdón a su hija.

Tantos sucesos juntos hicieron que Sol rompa bolsa y adelante su parto, que fue transmitido en directo por MegaNews. Así llegó al mundo la hija de la conductora y Gonzalo, bautizada Roberta en honor a su abuelo.


Desde su casa, Tomás (Diego Ramos) y el verdadero Martín Pells (Amigorena) siguieron los hechos y comprobaron que ya podían abandonar tranquilos el país.

La acción en "Los exitoso Pells" avanzó entonces seis meses en el tiempo para mostrar a Amanda (Andrea Bonelli) como dueña de su propio canal de noticias -en el que trabaja Diego (Walter Quiróz)- y a Sergio y Daniela esperando mellizos.

Mientras Roberto sigue preso, Andrada consigue mover sus influencias y salir libre. Pero ya no está más interesado en los medios, sino que apadrina a un futuro jefe de gobierno al que digita tal como lo hizo con el falso matrimonio Pells.

De este modo, la comedia ideada por Sebastián Ortega se despidió de la pantalla de Telefe no sólo con una reflexión sobre el poder de los medios a la hora de construir la verdad, sino sugiriendo que en la política se puede manipular el gusto de la gente tanto como se hace con las estrellas de televisión.

Un último bloque de noticias presentados por los Pells cerró con el tradicional beso entre los conductores que, por primera vez, fue sincero. Desde una isla paradisíaca perdida, mientras tanto, llegó una carta de Martín y Tomás, en la que anunciaban su intención de casarse.

Agridulces perdices entonces en el episodio final de una de las ficciones locales más originales y de mejor factura de los últimos tiempos que, si bien no descolló en audiencia, mostró una historia diferente y bien llevada.

Esta originalidad se vio reflejada en la venta que tuvo el formato de la tira -que fue adquirido en Chile, España y México- y en la cálida despedida de la audiencia, que la colocó anoche entre los ciclos más vistos del día. (Reporter)

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