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Asaltan y se llevan cautivos a futbolista e hija de 9 meses

El futbolista de Rosario Central Pablo Alvarez fue asaltado por dos delincuentes armados que se lo llevaron cautivo junto a su hija de 9 meses en José León Suárez, lo golpearon, le robaron y finalmente lo abandonaron con la beba tres horas después en proximidades de un asentamiento en Villa Ballester.
Fuentes policiales y familiares de Alvarez aseguraron que los ladrones se mostraron muy nerviosos, que le pegaron un culatazo en la cabeza, que le robaron un anillo de oro y hasta el bolso con los pañales de la beba y que nunca se dieron cuenta que era un futbolista.

"Es trágico lo que pasó. Fue un sufrimiento muy grande", dijo Mónica, la mamá del futbolista de Central, quien el domingo había jugado un trascendental partido frente a Belgrano de Córdoba en el cual el equipo rosarino consiguió la permanencia en Primera División.

Según las fuentes, todo comenzó cerca de las 21.30 de anoche, cuando Alvarez llegaba a bordo de una camioneta importada BMW junto a su esposa y a su beba de 9 meses a la casa de sus suegros, ubicada en Huergo y Gascón, de José León Suárez, partido de San Martín, en el noroeste del conurbano.

Al llegar, la esposa del futbolista se bajó del vehículo para abrir el portón de entrada a la casa, pero sorpresivamente aparecieron dos delincuentes armados que amenazaron a Alvarez y se subieron al vehículo.

"Lo hicieron correr a mi hijo al asiento del acompañante y se lo llevaron. Todo fue delante de la esposa, que sufrió un ataque de nervios al ver que también se llevaban a la beba", relató Mónica, la mamá de Alvarez.

Según la policía, durante el trayecto, los ladrones lo amenazaban y le exigían el dinero y sus objetos de valor, pero el jugador les explicaba que no tenía nada, que todo lo llevaba su esposa en su bolso.

Luego, lo obligaron a entregarles el anillo de oro de casado y hasta un bolso en el que había pañales y ropa de la beba, quien en todo momento estuvo dormida y sentada en su sillita de seguridad en el asiento trasero.

Finalmente, unas tres horas después, el futbolista y su beba fueron abandonados dentro de la camioneta en proximidades de la villa "La Rana", de Villa Ballester.

Fuentes policiales relataron que esta mañana, peritos en rastros trabajaban dentro de la camioneta del futbolista en busca de huellas de los delincuentes, quienes tenían unos 25 años.

"Estamos todos muy nerviosos, muy conmovidos con lo que pasó, especialmente porque se lo llevaron con la beba. Fue todo muy duro", dijo Mónica.

"Mi nuera se descompuso, mi esposo también, mis hijos también. Por suerte, (los delincuentes) no se dieron cuenta de que él era futbolista porque yo creo que hubiese sido peor", explicó la mamá del jugador.

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