El hecho ocurrió en una vivienda ubicada en Pergamino al 400, en el barrio porteño de Floresta. Allí, cerca de las 16 horas del miércoles, los jóvenes ladrones (el mayor de los cuales no superaba los 20 años) ingresaron por la fuerza a la vivienda y amenazaron a sus integrantes.
Con armas de puño y cuchillos, exigieron la entrega del dinero y los objetos de valor y ante la negativa de la familia comenzaron a torturar al jefe de familia, un comerciante de 63 años. Luego, uno de los malvivientes ató a la mujer y la quemó con una plancha caliente para que le diera la ubicación de los objetos de valor.
La mujer relató que los delincuentes amenazaron incluso con violar a la nena si no les entregaba las pertenencias.
Tras una hora de horror en la casa, los delincuentes intentaron escapar con celulares, un teléfono inalámbrico y 1.200 pesos en efectivo. Pero en el escape se cruzaron con la policía, cuando una patrulla que realizaba un recorrido por la jurisdicción se encontró con parte de la banda que huía por Directorio rumbo a la calle Tandil.
Dos de los asaltantes fueron heridos, tras un intenso intercambio de disparos entre el grupo de maleantes y efectivos policiales, en tanto los restantes integrantes de la banda resultaron apresados cuando intentaban huir a bordo de un transporte público.
La policía secuestró una pistola calibre 32 y una 9 milímetros junto con varios cuchillos y navajas que utilizaron para agredir a los miembros de la familia que vivió un verdadero horror dentro de su propio hogar.