Tendrán que hacer algo para ganar el titulo

Pocas veces se ha llegado a un final de torneo de méritos tan escasos entre los candidatos a quedarse con el título, que en las tres últimas fechas tendrán que hacer algo para saciar la sed de festejos.

POR Jorge Neri Boca, que venía de un golpe tremendo en su cancha ante el impredecible Vélez, volvió de Tucumán con una victoria tan valiosa como carente de buen fútbol, y con el susto a cuesta con el penal desperdiciado en una nueva tarde oscura de Juan Román Riquelme, el hombre que torneos atrás se ponía el equipo al hombro y los triunfos llevaban su sello encarnado.

Boca venía de tres triunfos ajustados y sin brillo, sea con Banfield o con Arsenal.

No obstante así, a duras penas y con los pibes emergentes de inferiores que tuvieron que salir al ruedo, sacaron 18 de los 21 puntos últimos y ese tal vez es el patrimonio más valioso en este final de torneo de vacas flacas.

Lo de San Lorenzo, quedar a solo dos puntos, parece un milagro.

Contrariamente a Boca, solo sacó cinco de los 21 puntos y pese a ello es uno de los grandes candidatos. Vaya locura que nos ofrece este torneo.

Apenas si ganó con susto al débil Gimnasia de Jujuy y enhebró caidas dolorosas, como la del sábado ante Lanús, y algunos empates sin gloria, y alguno de ellos, como ante Newell's, que hirió tanto como una derrota.

Pero San Lorenzo perdió también el juego límpido que tenía de mitad de campeonato para atrás, con una defensa ultra elogiada, una creación de juego inteligente y dos poderosos en la definición.

Apenas si le quedan astillas de esa buena madera y si no es por el barullo de los que gobiernan la vanguardia del torneo, hoy más que candidato sería un rezago.

Tigre, la cenicienta de este torneo, con un plantel que del desconocimiento generalizado se puso un nombre a partir de un juego coherente y algunas pinceladas de artistas recién ahora destacados, es lo más lógico que tiene este certamen.

Pero esas limitaciones pesan y si pierde lo hace en partidos que a la vista puede perder. Le pasó con Newell's, por momentos vapuleado por el Ogro Fabbiani fechas atrás, cedió puntos con un Colón que le hace frente al más pintado, y cayó ante un Estudiantes entero, con Juan Sebastián Verón iluminado y un equipo sólido que quiere volver a las noches coperas de Libertadores.

Tal vez si no hubiese invertido en la Copa Sudamericana, que por cierto lo tiene hoy a las puertas de un festejo, Estudiantes podría haber arrimado en este campeonato esquizofrénico.

Lanús se acomodó tarde. Con nuevo técnico aunque conocedor del plantel desde hace tiempo, como es el joven Luis Zubeldía, perdió puntos que fueron indoloros en su momento pero que ahora, con el horizonte de la punta cercano, comenzó a arrancar lamentos, tal cual admitió hoy la nueva figura del equipo, Eduardo Salvio, una de las frescuras que regaló este torneo.

Sacudió a San Lorenzo con buen fútbol y le impidió jugar a su rival en el Nuevo Gasómetro, pero también una semana atrás, había desaparecido del clásico sureño, cediéndole el protagonismo a Banfield.

Boca aparece como el que más chances tiene para coronarse, salvo que en este epílogo el Apertura y sus contendores brinden las carencias que soportan.

El choque con Racing, que hasta ahora no perdió con ninguno de los grandes, aparece como el principal escollo, aunque el cierre con Colón y los goles del Bichi Fuertes animan al cuidado.

San Lorenzo tiene tres finales justo en su peor momento y ya sabe que para el caliente clásico con Huracán del próximo fin de semana no contará con su principal creador, el Pitu Barrientos.

Tigre recibirá a River, que si gana verá cómo celebra Boca y si pierde seguirá quebrando record en su peor campaña.

Y Lanús aparece como el que tiene el fixture más accesible, aunque dependerá de cómo sale a la cancha, si lo hace como ante San Lorenzo, o como ante Banfield.