Según contó el protesorero de River, Héctor Cavallero, al canal de noticias C5N Simeone sufrió un "ataque de furia" tras el partido y lamentó que al Cholo "no le sale nada".
En lugar de ir al vestuario, Simeone tuvo que dirigirse al centro médico del Monumental para que le atiendan la mano derecha lesionada.
El hecho se supo en momentos en que la prensa se dirigía al salón de conferencias, donde se informó que el encuentro con los periodistas podía postergarse debido al incidente, pero tras unos quince minutos se supo que Simeone no iba a hablar.