Antes de partir rumbo a Buenos Aires, Albert le solicitó a Euclides Bugliotti, titular del Orfeo Superdomo, los planos en formato digital para poder evaluarlos con mayor tranquilidad. En horas de la tarde, la dirigente viajó rumbo a Londres. En la capital inglesa entregará un informe a los responsables de la FIT, quienes finalmente decidirán si la sede que albergará la final de la Copa Davis será Córdoba o Mar del Plata.
Las autoridades de la Asociación Argentina señalaron que la decisión no podrá demorarse demasiado, ya que se deberá trabajar en poco tiempo para dejar al escenario elegido en condiciones ideales de recibir la serie entre argentinos y españoles.
Ahora a los dirigentes de Córdoba y Mar del Plata sólo les queda esperar la decisión de la FIT.
En el partido previo por la disputa por quedarse con la serie, Córdoba parece haberle sacado una ventaja a Mar del Plata, ya que su candidatura contó con el fuerte y, quizá, desmesurado respaldo de David Nalbandian, y el capitán del equipo, Alberto Mancini.
Tanto el Orfeo de Córdoba, como el Polideportivo de Mar del Plata enfrentaron, a la hora de ser inspecccionados por la FIT, un mismo problema: su capacidad. Ninguno de los dos se acerca actualmente a los 12.000 lugares exigidos por el ente que rige al tenis a nivel mundial.
A pesar de esta limitación, autoridades provinciales y empresarios particulares, de uno y otro lado, realizaron propuestas millonarias para quedarse con la deseada serie.
Se mencionó que la postulación de Mar del Plata estaba respaldada por 9 millones de dólares, en tanto que la propuesta económica de Córdoba rondaría los 8 millones de la moneda estadounidense. En horas se conocerá la decisión de la FIT ente que, en teoría, tendría que tener una visión más amplia de la situación para decidir si la serie se juega en una u otra ciudad.
