Los ladrones, de entre 30 y 35 años estaban armados y vestidos con camperas con la sigla "PFA" de la Policía Federal e ingresaron al domicilio, donde estaba la esposa del joyero.
Otros dos cómplices, de entre 25 y 30 años, ingresaron a la casa y allí la banda explicó que lo único que querían era robar la joyería "Rings" que Strasorier tiene en Belgrano 279 del centro de San Isidro, según precisaron los voceros policiales.
Dos de los asaltantes se llevaron a Strasorier rumbo a la joyería, mientras que los otros dos quedaron en la casa para custodiar a su mujer.
Fuentes policiales explicaron a Télam que finalmente el robo a la joyería se frustró cuando los delincuentes notaron que en las inmediaciones del negocio había mucho movimiento y presencia policial.
Los delincuentes que quedaron en la casa se comunicaban permanentemente con los que fueron a San Isidro vía Nextel y así la mujer del joyero escuchó cómo uno de los asaltantes dijo "se pudrió todo" y antes de que huyeran de Morón en un automóvil color gris le avisaron que habían liberado a su marido.
Strasorier fue dejado en libertad y se acercó a la comisaría 1ra. de San Isidro para denunciar lo sucedido.
Su mujer llamó al 911 y también denunció el hecho ante los efectivos de la comisaría 1ra. de Morón que se acercaron a la casa.
El caso, caratulado como privación ilegal de la libertad, es investigado por el fiscal Horacio Vázquez, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 3 de Morón.
