Además, detalló las posibilidades de la provincia como ámbito de producción y filmación, en acuerdo con la industria privada y el Incaa (Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales).
D'Amico estuvo acompañado por Hernán Gullo, también directivo del Instituto, y ambos expusieron sus conversaciones con representantes de los distintos festivales para mejorar sus performances y recuperar salas en peligro de desaparición en ciudades y pueblos.
En tal sentido, manifestaron la elaboración de un catálogo en forma de libro, digital y por la Web en el que se evidenciarán las posibilidades de locaciones -mar, sierras, llanuras, lugares históricos- que ofrece la provincia a eventuales realizadores, tanto argentinos como extranjeros.
Se apuntará en principio al cortometraje -un formato que aún no tiene cabida en las salas comerciales-, para el que se instituyó un premio de 5.000 pesos aportados por el Instituto a cada festival realizado en su territorio para premiar al mejor título.
D'Amico agregó que todos los cortos ganadores participarán en una muestra paralela integrada al Festival Internacional de Cine de Mar del Plata y en circuitos de exhibición no comerciales, como el Cine Móvil provincial y un ciclo que se realizará en el Village Pilar durante noviembre.
El programa incluye la formación y concentración de profesionales en áreas determinadas, capaces de abastecer producciones de rodaje local, además del fomento de aportes en hotelería y transporte para los equipos profesionales.
El circuito de festivales cinematográficos de la provincia de Buenos Aires incluye los de Uncipar (Villa Gesell), Tandil Cine, Escobar de Película, Tandil Cortos, Festival de Artes Audiovisuales de La Plata y San Pedro Cortos.
La lista se completa con Festi Freak (La Plata), la sala Lucas Demare (Olavarría) y Cine Corto de Tapiales.
