Según a policía, todo comenzó cuando el hijo de la víctima llegó a la casa de su padre y encontró la puerta de la vivienda cerrada con candado desde el lado de afuera.
Como su padre no le contestaba los llamados, el hombre abrió el candado con una llave que tenía y entró a la casa.
Al llegar a la habitación, encontró a su padre en el suelo contra una esquina y semisentado, en medio de un charco de sangre producto de un corte en el cuello.
Los peritos determinaron que había muerto degollado y que en la casa faltaban dos escopetas y una motocicleta, por lo que sospechan que el crimen pudo haber estado relacionado con un robo.
El hecho quedó en manos de personal del Destacamento Manzanares, jurisdicción de Pilar 1, e investigadores de la SubDDI Pilar, que trabajarán bajo las órdenes de la fiscalía 2 de Pilar.