En declaraciones periodísticas, Casaretto, prácticamente la primera voz autorizada de la Iglesia en opinar sobre el conflicto, dijo que "aquí, como en todas las cosas en el país, hay que hacer primar el bien común por sobre los bienes particulares".
"Todos tenemos intereses particulares, todos tenemos intereses de grupo, y el Gobierno también tiene sus preocupaciones, pero por sobre todo tenemos que hacer primar el bien común", advirtió.
Ayer, antes de conocerse la decisión del campo de proseguir con el paro, los obispos de Entre Ríos exhortaron al Gobierno y a los productores rurales a continuar con el diálogo para alcanzar una solución definitiva al conflicto y sugirieron al Poder Ejecutivo "reducir" las retenciones para afianzar "la amistad social" entre los argentinos.