El proyecto también prohíbe la publicidad de todos los productos derivados del tabaco, en cualquier de sus formas, en medios de comunicación masiva y pública, radial, televisiva o escrita.
El proyecto, elaborado por los senadores del Frente para la Victoria-PJ, Mariel Urruti, Julio Salemme y Osvaldo Goicochea, declara al tabaco y su derivados "sustancia tóxica y perjudicial para la salud, por lo que ante la exposición de cualquier individuo al tóxico tendrá derecho a hacer prevalecer su opinión respecto al no consumo de tabaco en su cercanía en lugares cerrados".
La iniciativa prohíbe fumar en espacios públicos dependientes de los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial, entes descentralizados y autárquicos.
También prohíbe fumar en "espacios compartidos cerrados de accesos públicos del ámbito privado", detalla el proyecto.
Dispone que podrán habilitarse zonas para fumadores, las que deberán estar "debidamente señalizadas y compartimentadas y no ser zona de paso obligado para las personas no fumadoras".
En estos espacios, que deberán tener adecuada ventilación, sólo podrán ingresar personas mayores de 18 años.
En el caso de los fumadores que violen esta disposición, sufrirán multas de hasta 100 etiquetas de cigarrillos, unos 3.500 pesos; y en el caso de fabricantes y distribuidores, de entre 1.000 y 10.000 etiquetas de cigarrillos, es decir de entre 3.500 a 35 mil pesos.
La iniciativa sólo permite la publicidad de cigarrillos "en el interior de los lugares de venta" y limita la realización de eventos deportivos, educativos y recreativos financiados por empresas "ligadas al consumo de tabaco".
