Respecto de la construcción de la planta, Grandoni precisó que comenzada la obra está estipulado por AYSA que en 14 meses concluirá el primer módulo de la planta. “Hay que trabajar en paralelo las redes domiciliarias, porque de lo contrario avanzaríamos en un aspecto de la solución sin una visión integral de la infraestructura y el servicio. Estamos hablando de una inversión de alrededor de 600 millones de pesos para proveer de agua potable a 250.000 habitantes de nuestro distrito” sostuvo.
Tambien Grandoni explicó que está previsto realizar un estudio a través de la Comisión Nacional de Energía Atómica, el Instituto Malbrán y el Instituto Santa Fé que consiste en el estudio del agua que consumen las viviendas e industrias. Además de los afluentes industriales y urbanos, se realizará un estudio del aire.
Los vecinos autoconvocados del Barrio Las Tunas fueron informados sobre la situación y los pasos previstos en materia de estudios y obras por el propio secretario del municipio, quien sintetizó: “El objetivo principal que nos fijamos es proveer de agua corriente y cloacas a todos los habitantes de Tigre”.