Macri aclaró que si bien era "muy respetuoso" de la tarea de la justicia también debía "hablar claro cuando alguien comete abuso de poder".
"Me estoy refiriendo a la jueza Elena Liberatori, que por tercera vez falla en contra de una decisión gubernamental sin siquiera darle al goberno la posibilidad de la legítima defensa", expresó en una rueda de prensa en la que sin embargo no aceptó preguntas.
La magistrada, acotó Macri, "avanzó en competencias que eran del gobierno" ya que "es un disparate que ella le diga al gobierno que renueve todos los contratos del año 2007 sin decir a cuántos ni a cuáles se refiere".
"Nosotros vamos a seguir avanzando en la tarea de gobernar para que trabajar no sea lo mismo que no trabajar", advirtió y confesó que le "hubiera gustado" hablar de "las cosas que se hacen" y no de "los palos en la rueda" que le ponen en el camino.
"Sabemos que estamos haciendo lo correcto, esta transformación no es patrimonio de un gobierno sino de todos los vecinos", sostuvo Macri y adelantó que ya le dio orden al rocurador de la Ciudad, Pablo Tonelli, para recusar a Liberatori y apelar el fallo.
La vicejefa de gobierno, Gabriela Michetti, quien sí aceptó responder las preguntas de los periodistas cuando Macri se retiró del salón, dijo que con este nuevo fallo "se están avasallando las facultades del Poder Ejecutivo".
"Claramente es evidente que esto es un abuso de poder", indicó, y habló de "intereses particulares muy arraigados en la Ciudad" cuando se la interrogó sobre posibles motivaciones de la jueza para fallar contra el gobierno de la Ciudad tres veces en menos de diez días.
"La celeridad con la que lo hizo y los argumentos que usó, como recortes de notas periodisticas, nos dan la pauta de que esto no es muy serio y que se trata de una invasión de poderes", declaró Michetti.
La vicejefa relativizó además la posibilidad que desde el gobierno porteño se promueva el juicio político de la magistrada al señalar que "no es algo en lo que se esté pensando en este momento". (Télam)
