"Antes de empezar estimábamos que hasta marzo íbamos a recolectar unas 40.000 armas, pero ahora creemos que en ese momento vamos a estar muy cerca de las 90.000. Vamos a relanzar el plan y a extenderlo en lugares del Interior donde todavía no fuimos", explicó el director del ReNAr, Andrés Meiszner.
Esos sitios que menciona son las provincias de Santa Cruz, Chubut, La Pampa, Santiago del Estero, Catamarca, Misiones y Formosa.
"Evidentemente hay una necesidad de la gente de sacarse de encima el problema que significa tener un arma. Es por eso que decidimos seguir, pero no queremos que el plan languidezca, se va a relanzar en marzo, con mayor publicidad. En del presupuesto 2008 hay 10 millones para el programa", explicó Meiszner.
En la Argentina hay alrededor de 1.200.000 registradas. En el circuito ilegal la cifra es aún mayor: se calcula que más de dos millones alimentan el mercado negro. Desde 1997 más de 32.000 muertes fueron a causa del disparo de alguna de ellas.
Los canjes y las destrucciones seguirán haciéndose los días de semana en las 12 sedes que tiene el ReNAr en todo el país y en varias asociaciones de tiro.
El plan es anónimo y prevé una amnistía para quienes entreguen sus armas, sin importar si tienen pedido de captura u otras irregularidades. Por cada una que se entregue se recibirá, según el calibre, hasta 450 pesos.
El pago no se hace en efectivo: se entrega un cheque al portador que se cobra en una sucursal del Banco Nación. Luego de ser inutilizada delante de su dueño, el arma terminará en una planta de fundición. (Télam)