El ministro alemán de esa forma hacía referencia a las conversaciones sobre cambio climático iniciadas por el presidente estadounidense, George W. Bush, en septiembre.
Los Estados Unidos invitaron por entonces a 16 grandes economías, entre los que se incluyen los países europeos Japón, China e India, a discutir un posible programa de reducciones voluntarias nacionales en las emisiones de gases con efecto invernadero.
La propuesta norteamericana se opone a los objetivos vinculantes de reducción de emisiones que defiende la Unión Europea.
El máximo responsable de la ONU sobre cambio climático, Yvo de Boer, se mostró preocupado por el punto muerto al que han llegado las conversaciones entre los paises europeos y Estados Unidos, ya que consideró que podría desbaratar el proceso y la futura 'Hoja de ruta' que se redacte tras la Cumbre de Bali.
"Estoy muy preocupado por el ritmo de las cosas. Si no conseguimos un acuerdo en el futuro, entonces todo el castillo de naipes se romperá", afirmó De Boer.
Por su parte, la subsecretaria de Estado norteamericana, Paula Dobriansky, dijo a la prensa que la Cumbre todavía no ha resuelto nada, por lo que está en el principio de las negociaciones y no en el final.- (Télam)
