"Durante cuatro meses vivimos un calvario gratuito e injusto", dijo Magnasco en declaraciones a la prensa, y responsabilizó a los dos fiscales del caso, Javier Di Santo y Fernando Moine, de actuar con "negligencia" y de mantener la imputación en su contra "sólo por la necesidad de mostrar algún avance en una causa estancada".
La demanda fue presentada en el Juzgado Civil y Comercial de Sexta Nominación, a cargo de Mariana Martínez de Alonso y en ella, Magnasco pide una indemnización "por la afectación del honor, el descrédito profesional, las angustias y los padecimientos, las afectaciones psíquicas, la inusitada prolongación de la situación procesal, el padecimiento económico, los sufrimientos de la familia y el error en la prestación del servicio de justicia".
También exige asimismo que el Estado le devuelva los 150.000 pesos que se vio obligado a pagar para defenderse de la acusación penal y 23.000 pesos por otros conceptos.
Cuatro días después, ante los rumores que indicaban una presunta relación entre Magnasco y la víctima, el entonces asesor letrado de la Secretaría de Seguridad provnicial se presentó ante la fiscalía y pidió que se le extrajera sangre y así cotejar su ADN con el de los fluidos hallados en la escena del crimen.
A partir de esa presentación, Di Santo lo imputó por "sospechas leves" y lo indagó el 22 de febrero pasado, pero la defensa pidió el sobreseimiento, lo que fue rechazado por el Juez de Control de Río Cuarto, Daniel Muñoz.
Luego, los defensores apelaron ante la Cámara del Crimen y fue la Sala II, integrada por Silvina Marcotullio, Oscar Testa y Carlos González Castellanos, la que a fines de marzo pasado anuló todo lo actuado.
Nora Dalmasso, de 51 años, fue estrangulada el 25 de noviembre último y su cuerpo fue hallado un día después en su casa del barrio Villa Golf de Río Cuarto. (Télam).
