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Los delincuentes tomaron mate con las victimas antes de liberarlas

El matrimonio mantenido de rehén hoy por tres delincuentes armados en su casa de la localidad bonaerense de Don Torcuato dijeron que los asaltantes no fueron violentos, que sólo querían robar plata y que antes de entregarse miraron televisión y tomaron mates sus dos hijas.
"Primero quisieron robar y después sólo querían escapar", dijo Julio Taborda, de 36 años, quien señaló que le dio la impresión de que los delincuentes nunca había tomado de rehén a una familia. "Se portaron bien. No fueron agresivos salvo en el primer momento cuando nos metieron adentro", dijo María Julia, la esposa de Taborda.

La mujer recordó que al inicio de la toma, encerraron a sus hijas de 8 y 12 años en su habitación para que los delincuentes no accedieran a ellas aunque aclaró que los asaltantes nunca tuvieron intenciones de hacerlo.

"Ellos querían robar e irse. Pero se les complicó porque llegó la policía", agregó María Julia, al retirarse de la comisaría de Don Torcuato donde denunció lo ocurrido.

Taborda recordó que durante las siete horas que estuvo cautivo presenció las negociaciones en las que los delincuentes pidieron a la policía un auto para escapar frente a cámaras de televisión y un familiar para asegurarse que al salir no les iba a pasar nada.

"Estuve nervioso hasta que pudimos sacar a las nenas. Después ya estaban como entregados, sin salida", recordó el comerciante, que señaló que los delincuentes "en ningún momento se enojaron".

Respecto de qué hicieron durante el extenso cautiverio, Taborda relató: "Estuvimos tomando mates con ellos, con las nenas. A las chicas les preguntaron por el colegio y les pusimos la tele para que vieran los dibujos" animados.

"Cuando decidieron entregarse el primero que salió de la casa fui yo", contó el comerciante, que agradeció a la policía bonaerense por el trabajo que realizaron para liberarlo.

"No sé cómo reconstruir mi vida. Por lo pronto me quiero reencontrar con mis hijas e irme a mi casa", concluyó María Julia, quien dijo que sus hijas están tranquilas en la casa de una tía.

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