Los investigadores aún no saben cómo los ladrones burlaron a la seguridad privada y por dónde entraron.
Lo ciertos es que los dos asaltantes entraron a la administración del country, ubicada en el centro del predio y amenazaron con armas de fuego a los cuatro empleados que había en el lugar.
Según las fuentes, los delincuentes exigieron la llave de una caja fuerte, pero los empleados no la tenían, razón por la cual efectuaron un par de disparos intimidatorios.
Finalmente, los asaltantes les robaron celulares, relojes, poco dinero y otras pertenencias a los empleados y escaparon del lugar.
Los ladrones permanentemente, mientras estuvieron en el lugar, intimidaron con sus armas a los trabajadores a quienes dejaron maniatados.
Cuando se desataron, los empleados avisaron a la guardia y a la policía, quienes no pudieron ubicar ni detener a los ladrones.
Los investigadores cuentan con las filmaciones de los movimientos de los dos asaltantes dentro del country, pero aún no descifraron por dónde entraron ni por dónde salieron, según contaron los voceros.
El caso es investigado por la fiscal Andrea Palacios, de las fiscalías descentralizadas de Escobar, pertenecientes al Departamento Judicial de Zárate-Campana.
