Bajo un cielo despejado y en una calurosa mañana, más de 100.000 personas asisten al acto, que comenzó a las 07H30 locales (11H30 GMT), en la Plaza de la Revolución de la ciudad de Camagüey, 540 km al este de La Habana.
"Los tiempos que vivimos nos convocan a concentrar los esfuerzos en la defensa del país y la recuperación de la economía (...), elevar la producción, la productividad y el ahorro. Es momento de reflexión para profundizar en las insuficiencias y deficiencias que sabemos aún tenemos", dijo Salvador Valdés, secretario general de la Central de Trabajadores de Cuba (CTC), en el primer discurso.
La simbólica fecha marca el primer año de convalecencia de Castro, visto por última vez en público en la pasada celebración del 26 de julio, cuando pronunció dos discursos en las ciudades de Bayamo y Holguín, a unos 750 km al sureste de La Habana.
Un día después fue sometido a la primera de varias operaciones, tras una hemorragia intestinal, y el 31 de julio de 2006 cedió el poder a su hermano Raúl, ministro de Defensa de 76 años de edad.
Un año después y a sus casi 81 años, que cumplirá en agosto, Castro aún convalece de una enfermedad que lo puso al borde de la muerte y prevalece la incógnita de si retornará al poder, o en qué condiciones y cuándo lo hará.
"Ya tiene edad y le falta salud, debe dejar a otros seguir con la revolución", dijo a la AFP José Gutiérrez, de 21 años, quien esperó el acto en la Plaza, oyendo música y bailando.
A diferencia de otras cinco fechas o actos simbólicos del último año, esta vez no se esperaba una reaparición pública del gobernante, sobre todo porque la celebración es en Camagüey, lejos de La Habana, y más aún cuando el miércoles un anunció oficial precisó que el acto sería presidido por Raúl.
Varios cubanos interpretaron la ausencia de Fidel como una clara muestra de que no está listo para volver al poder y más aún, dudan de que algún día lo haga.
"Creo que esto es un paso más en la oficialización institucional de la sucesión del paso de poder que Fidel Castro hizo a Raúl Castro hace un año", opinó el opositor moderado Manuel Cuesta.
Esta es la primera vez que Castro está ausente en la fiesta que conmemora el inicio de la lucha guerrillera que desembocó en el triunfo de la revolución de 1959. En 1994 y 1997, Raúl pronunció el discurso, pero Fidel encabezó el acto, presente en la tribuna.
Desde que fue visto por última vez hace un año, Fidel sólo ha aparecido en fotos y nueve videos, y desde el 29 de marzo publica en la prensa sus "Reflexiones del Comandante en Jefe".
En el marco de la celebración de esta fecha patria, el miércoles fue presentado en la ciudad de Camagüey el libro "Reflexiones de Fidel", que compila 18 de los 31 artículos de prensa hasta ahora escritos por el líder cubano, la mayoría contra Estados Unidos.
En el último video, una entrevista grabada, difundida el 5 de junio, el líder cubano apareció más recuperado de peso, de buen ánimo, pero aún frágil y aún con cierta dificultad para hablar.
Desde esa vez no se tiene detalles de la salud de Castro, quien en un mensaje emitido el 24 de mayo precisó que había sufrido "varias operaciones", pero sin mencionar nada sobre un eventual retorno al poder.
Tras la celebración del 26 de julio, Cuba se mete de lleno en el proceso electoral que iniciará en octubre y concluirá en abril de 2008, cuando se decidirá si Castro continuará al frente del gobierno.
