El defensor afirmó que Luly -como le dicen a su clienta-, "está pasando una situación terrible, porque es una chica de sólo 21 años que primero perdió a su mejor amiga y ahora la acusan de ser la asesina".
"Dejó de trabajar porque no puede hacerlo. Ya cuando asesinaron a su amiga tuvo un apoyo psicológico, cuando hicieron la reconstrucción tuvo una recaída y ahora que la acusan de ser la asesina está destrozada", comentó Pizarro Posse.
El abogado sostuvo que "la hipótesis del fiscal (de la causa), Alejandro Guevara, no está probada" y, entre otros elementos, dijo que "no tiene testigos directos que imputen en el crimen a Lucila, no encontró huellas de mi clienta, ni su ropa ensangrentada, ni ninguna otra evidencia en su contra".
Respecto a la reconstrucción del hallazgo del cadáver, en la que, según el fiscal, Luly dejó entrever que era la asesina, Pizarro Posse sostuvo que "fue bien nulificada por el juez de Garantías".
"En ese momento el fiscal ya sabía que iba a imputar a Luly, pero la convocó como testigo y la fueron induciendo para que se autoincrimine. La diligencia es nula y apoyamos con un escrito ante la Cámara la postura que tuvo el juez", agregó.
Por último, el defensor señaló que en ese escrito solicitaron una serie de medidas "que quedaron sin hacer".
"Nuestra tarea no es ponernos en investigadores sino demostrar la inocencia de nuestra clienta, pero en esta causa faltan hacer cosas que pueden esclarecer el crimen", indicó.
Grabenheimer fue encontrada asesinada el 10 de enero último a las 23:30 en el PH de dos pisos que desde hacía un año y medio alquilaba y compartía junto a Frend en Güemes 2280 de Florida, partido de Vicente López.
Sol estaba tirada boca abajo, al costado de su cama, en el dormitorio de la planta superior del PH.
La víctima fue asesinada en su cama de cuatro puñaladas aplicadas en el cuello con un cuchillo de un solo filo de al menos 12 centímetros de hoja, no encontrado en la escena del crimen.
Pero los forenses determinaron que previo a las puñaladas, Sol fue estrangulada con un cable que fue encontrado detrás de una cortina, en forma de lazo y con el diámetro de una cabeza.
Si bien se investigaron como hipótesis a un obrero, una mucama y hasta un crimen mafioso, el fiscal encontró contradicciones en el relato de Luly y realizó una reconstrucción del hallazgo del cadáver.
Allí el novio y la prima de la víctima negaron que Luly haya subido a ver el cadáver, como lo declaró la sospechosa.
Pero lo más importante fue cuando Frend dijo que el cable de computadora hallado en la escena del crimen seguramente lo habían usado para estrangular a Sol, cuando ése era un dato que los testigos no sabían.
El fiscal Guevara pidió la detención de Frend el 21 de mayo, pero el juez de Garantías de San Isidro Orlando Díaz la rechazó y decretó la nulidad de la reconstrucción al advertir que durante la diligencia la chica actuaba como testigo y nadie puede declarar contra sí mismo.
La causa ahora está en la Sala II de la Cámara de Apelaciones y Garantías de San Isidro, que deberá resolver si el procedimiento fue legal y si alcanzan o no los elementos para detener a Frend. (Télam)
